Salesland

El poder de la comunicación en la formación experiencial

Uno de los grandes descubrimientos de mi trayectoria profesional, fue cuando fui consciente del  “poder de la comunicación”. Está demostrado que nuestras palabras están estrechamente relacionadas con nuestra actitud, y ésta a su vez con nuestras creencias. La pregunta sería: ¿Es mi actitud la que da lugar a mis palabras o son mis palabras las que condicionan mi actitud?

El_poder_comunicación_formación_experiencial
Noelia López Técnico de Recursos Humanos de Salesland España

Voy a compartir contigo cómo el poder de la comunicación toma vida en los Talleres Experienciales que día a día llevamos a cabo, basándonos principalmente en la creación de un ambiente de respeto y aprendizaje; pero… ¿Qué es realmente un Taller Experiencial en Salesland? Se basa en el aprendizaje a partir de utilizar una serie de herramientas y business games especialmente diseñados para simular situaciones habituales que nuestros promotores/as se van a encontrar en su día a día de trabajo.

El primer objetivo es que ellos mismos toman conciencia de cuál es el “ente motivador” que les hizo interesarse por la oferta de trabajo y, partiendo de ahí,  la actitud va transformándose para crear un espacio mágico donde, los que nos dedicamos a esto, lo tomamos como un regalo que ellos nos ofrecen sin esperar nada a cambio.

¿Cómo interactuamos? Realmente ellos son los protagonistas de sus vidas y de esta manera lo son también del Taller, haciendo que el Formador/a pase directamente a la categoría de Facilitador/a donde su presencia se limita a compartir píldoras de información, comunicando a través del respeto y trabajando con ellos para, entre todos, dejar a un lado la actitud de queja.

¿Cómo comunicamos sin comportarnos de manera   directiva? ¡Es muy sencillo! Simplemente vamos a educar nuestras cuerdas vocales y "bucales" y, naturalmente, nos saldrán frases como: “Te invito a…” o cambiar el “Por qué” Acusador por el “Qué” Empático, sin olvidarnos de los silencios que les aportan protagonismo y activan sus recursos para dar soluciones creativas dejándonos a los Facilitadores como meros acompañantes.

Básicamente, el arte de la comunicación implica dominar tres aspectos: lo que decimos (palabras), cómo lo decimos (tono) y cómo actuamos (expresión corporal).

Cuando nos expresamos tenemos que poner especial cuidado en hablar en positivo, manifestando lo que realmente queremos. Y tú, ¿cómo te expresas habitualmente?

Compartir: